Ser extranjero en algunos lugares puede significar ser tratado como una celebridad. A pesar de que en algunos países los inmigrantes son vistos de mala manera y como si tuvieran lepra, existen ciudades donde sin importar de qué país seas, si eres extranjero, eres una celebridad. En especial si hablas un idioma distinto.
No es la primera vez que me veo como una extranjera en un país o ciudad, pero creo que es la primera vez que puedo entender a amigas como Tanya (mitad japonesa mitad indú, con quien compartí estudios de fotografía en Chavón) y Elsie (estadounidense que hizo un semestre en la universidad y con quien compartí una materia). El trato es significativamente distinto, como si todos hicieran lo posible para que la persona se sienta acogida, y en algunos casos terminas sintiendo como un animal extraño que está en exhibición.