12 de enero 2012.
Después de mi tan movida última semana del 2011, la semana siguiente fue de total recuperación. Vease dormir mucho, hacer nada, descansar y vaguear hasta donde se podía. Pasados los días entonces estuve un poco más activa: empecé a hacer las tareas asignadas desde diciembre, ordené mi habitación, lavé la ropa y fui al salón. Esto último toda una experiencia.